13 - 5 - 2018 / GEOLODÍA 2018: LAGOS DE COVADONGA

 

 Después de la buena experiencia con Geolodía durante el pasado año, repetimos… A las 10 estábamos en la estación de autobús de Cangas de Onís, donde el comité organizador tenía dispuestos unos autobuses para subirnos a los Lagos de Covadonga. Nuestro grupo fue conducido por Nemesio Heredia Carballo, científico titular en Instituto Geológico y Minero de España y sus especialidades son la Cartografía Geológica, la Geología Estructural y las relaciones Tectónica-Sedimentación y lleva investigando el levantamiento de las grandes cordilleras desde hace más de 30 años.
En el aparcamiento de Buferra, iniciamos la ruta con tan buena compañía, haciéndonos un repaso de Primer espacio protegido de España: el Parque Nacional de la Montaña de Covadonga compartido por Asturias, León y Cantabria, y declarado Reserva de la Biosfera en 2001.
Las rocas que observamos en el parque Nacional de Picos de Europa se formaron en los últimos 500 millones de años, siendo cuarcitas las más antiguas; y por encima de las cuarcitas existe un periodo de sedimentación carbonatada, producido por los restos de un mar cálido hace unos 300 millones de años aproximadamente (de ahí que el tipo de roca dominante sea caliza, responsable de su particular paisaje externo y subterráneo)
Hace unos 20-70 millones de años, el choque de las placas africana y europea, dio lugar a todas las cadenas montañosas actuales de la Península Ibérica, entre ellas, la Cordillera Cantábrica. Posteriormente la nieve y el hielo, serían los responsables de moldear el paisaje.
El relieve característico de los Picos llamado karst, es el resultado de la disolución de las calizas por el agua a lo largo del tiempo: el karst superficial está dominado por las dolinas (depresiones circulares en forma de embudo, por las que se filtra el agua) y de este modo, dan lugar al karst subterráneo, que incluye más de 3.700 cuevas que suman 420 km de conductos subterráneos.
Nuestra primera parada fue en el mirador del Príncipe, desde donde contemplamos en la vega de Comeya, de morfología glaciar y por donde discurren unos pequeños arroyos que acaban desapareciendo por un sumidero o pónor (anteriormente estaba ocupado por un lago)
La segunda para fue en las minas de Buferra, restos de la explotación artesanal del mineral de hierro y manganeso; la disolución de la caliza fue liberando el mineral, y la mena al ser insoluble, fue quedando en las oquedades kársticas, siendo necesario remover los sedimentos acumulados por parte de los mineros, y dando lugar a unos vistosos pináculos.
Nuestra tercera parada es en la Picota, la gran morrena central formada por la unión de las lenguas glaciales de Enol y Ercina.
La parada número cuatro fue en el Lago Ercina, que en la actualidad se está rellenando de sedimentos perdiendo profundidad y probablemente ya hubiera desaparecido, de no haber levantado un muro en el extremo sur, que impide que el agua se filtre en esa orilla; cuando llueve mucho o con el deshielo, el lago desborda el muro y el sumidero drena el agua sobrante.
La quinta parada es en Las Reblagas, en la que vemos una roca de color anaranjado, por trasformación de la caliza en dolomía.
En la vega del Bricial (sexta) contemplamos una depresión kárstica; y cuando hay grandes precipitaciones, se forma una cascada que llaman “La Meona”, y puede dar lugar a una laguna temporalmente.
En la séptima parada en la Jelguera, vimos varios ejemplos de sumideros.
Llegamos a la Vega de Enol, tras atravesar el bosque de Palomberu, con magníficas hayas, con grandes praderías debidas al material arrastrado y triturado por el hielo con pequeñas dolinas que filtran el agua y los materiales finos.
Finalizamos en el lago de Enol, donde nos explicaron su formación al retirase las lenguas glaciares; este lago se alimenta de aguas de precipitación y de agua subterránea; parte se evapora y parte se drena a través de un arroyo que fluye a la Vega de Comeya. En la actualidad se está haciendo un seguimiento del lago.
El día fue tremendo: frío, agua-nieve… pero mereció mucho la pena.
Nuestro agradecimiento a Nemesio, por el esfuerzo de trasmitirnos su conocimiento, permitiéndonos poder ver “con otros ojos” este paraje natural tan maravilloso

 

 

La Vega de Comeya Minas de Buferrera El grupo
Dique en Lago Ercina Vega del Bricial Sumidero en La Jelguera
El recorrido Vega Enol Lago Enol